1. Prográmelo.
Lavar la ropa es una tarea doméstica, simple y llanamente. Así que probablemente nunca te sentirás con ganas de hacerlo. Entonces, para asegurarse de que se haga, programe un día y una hora en que se dedicará a lavar la ropa. Algunas familias tienen un día de lavandería en el que se ocupan de toda la ropa de la semana. Personalmente, me gusta lavar una o dos cargas por día para evitar una maratón de lavandería. Hago esto a primera hora de la mañana para que empiece a lavarse mientras trabajo en el desayuno.
2. Reclute ayuda.
Al igual que mis hijos son responsables de sus propios platos (no es que siempre funcione), también son responsables de colocar su propia ropa sucia en las cestas de nuestra lavandería. Mi hija adolescente también lava y dobla la ropa durante las semanas que estoy muy ocupada con el trabajo. No coloques toda la carga de lavar la ropa sobre ti mismo. Si su cónyuge o uno de sus hijos sabe cómo hacerlo, pídales que lo ayuden. Te facilitará mucho las cosas.
3. No lo laves.
Hay varias cosas que no necesitan lavarse después del primer uso. Haga que sus hijos usen su pijama por algunas noches antes de colocarlo en la pila de ropa sucia. Deja que tus toallas se sequen para que se puedan usar más de una vez. ¿Usaste un par de pantalones de vestir o una falda para la iglesia? Cuélgalo y póntelo de nuevo. No solo tendrás menos ropa para lavar, sino que tu ropa no se desgastará tan rápido.
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4. Guárdelo el mismo día.
Así que lavas una carga de ropa, la arrojas a la secadora y luego se queda allí durante varios días. Quien lo ha hecho * Levanta la mano * Muchos de nosotros somos culpables de esto y, lamentablemente, eso te impide progresar. Cuando su lavadora o secadora sirva como un lugar para guardar la ropa, no podrá usarla para lo que debe hacer. No comience una nueva carga si no tiene planes de doblar lo que ya se ha secado. Terminarás con varias pilas de ropa limpia que necesitarás volver a lavar porque eventualmente no podrás distinguir entre la ropa sucia y la limpia.
5. Ordene a medida que dobla.
Nunca entendí el concepto de clasificar la ropa y luego doblarla. Es simple agregar un paso adicional al manipular la ropa dos veces. En su lugar, doble o cuelgue la ropa mientras la clasifica en el proceso. También encuentro que doblar la ropa mientras veo un programa favorito hace que la tarea sea más fácil de manejar. Una vez que se haya ordenado toda la ropa, haga que cada miembro de la familia guarde su propia ropa. No, puede que no sea perfecto, pero la perfección es la raíz de todas las pérdidas de tiempo de todos modos.